Desde los 80’s se han estado utilizando algoritmos de inteligencia artificial para apoyar a oftalmólogos. Particularmente para detección temprana de queratocono. Desde entonces, la tecnología ha seguido evolucionando, incrementando el espectro de alcances que podría llegar a tener para campos médicos en cualquier rama. Existen muchas herramientas que utilizan inteligencia artificial con propósitos más generales y que pueden ayudar a los oftalmólogos en materia administrativa, por ejemplo. Sin embargo, cada vez más se está abriendo el camino para reforzar decisiones clínicas con la tecnología. Por ejemplo, está empezando a visualizarse un posible futuro en el que se fusionen algunas funciones clave de los especialistas de córnea y la inteligencia artificial.
Usos de inteligencia artificial en córnea
En años recientes, el desempeño de la inteligencia artificial en el área de oftalmología, ha tomado la forma de sistemas autónomos que se usan para tamizaje a gran escala de retinopatía diabética. Los expertos opinan que en el área específica de córnea es posible, pero poco probable, que la inteligencia artificial tome una ruta autónoma como en este caso. La necesidad de tamizaje repetido en afecciones corneales simplemente es menor que en problemas de retina.
Por lo tanto, la proyección principal por ahora de la inteligencia artificial en materia de córnea es integrarla a herramientas que eleven la efectividad y alcance de especialistas. Implementar tecnología refractiva y de láser aumentada con inteligencia artificial sería una gran estrategia para simplificar las cirugías y elevar la seguridad del paciente, al igual que abrir la disponibilidad de atención médica a aún más pacientes.
También hay iniciativas para utilizar inteligencia artificial en procesos diagnósticos. No sólo se puede entrenar para reconocer y analizar imágenes, sino que se le pueden alimentar bases de datos y utilizarla para dar una respuesta de “sí” o “no” en cuanto a la presencia de una afección. También puede utilizarse para reunir información crucial para procesos pre-operativos. Estas ideas son consistentes con la noción de usar inteligencia artificial para elevar las herramientas de los especialistas de córnea, y permitirles mejorar sus procesos diagnósticos y quirúrgicos, para ofrecer mejores resultados a más pacientes.
El futuro de la inteligencia artificial en córnea
Hasta hace recientemente, no existía mucha confianza en un impacto a gran escala de la inteligencia artificial en córnea. Sin embargo, la rápida revolución digital que hemos estado experimentando las últimas décadas, acelerada aún más por la pandemia, parece estar cambiando eso. La percepción de los oftalmólogos, y de la población general, sobre lo que se puede hacer con tecnología es más favorable.
La inteligencia artificial ya es extremadamente útil para oftalmólogos en todo el mundo, y es claro que su impacto seguirá creciendo. Ya es previsible un punto en el que sea indispensable para tomar decisiones clínicas, aunque ese punto probablemente no sea en el corto plazo. Cualquier médico que la utilice en este momento debe recordar que no es infalible, y que la ruta para que deje de serlo es larga. Se requieren cientos de miles de casos de información para entrenar a los algoritmos a esa escala. Sin embargo, esa información ya está siendo recabada, y es emocionante imaginar las posibilidades.